Una nueva receta de postre en la columna de Eli, pero en esta ocasión es una de las recetas de mi infancia, y espero que puedan disfrutarla tanto como yo.
CROVAT
Cuando era chica mi mamá (que me ama y me mima), me hacía galletas caseras para llevar de merienda a la escuela. Todas las semanas tenía alguna cosita rica y casera para llevar y compartir en el recreo.
Las galletas de avena y pasas eran unas de mis favoritas ya que se podían modificar ya hacer de diferentes sabores como por ejemplo coco, naranja, chocolate, simplemente se separaba la masa en varias porciones y se agregaban los sabores.
Esta vez yo las preparé siguiendo al pie de la letra la receta, receta que dicho sea de paso está escrita a mano por mi cuando era chica, así que tiene muuuchas faltas de ortografía, letras al revés y está en una hojita amarilla por el tiempo, de una libretita que tiene mamá.
Galletas de avena y aceite
Ingredientes:
CROVAT
- 2 huevos
- ¾ taza de azúcar, yo utilicé azúcar rubia, puedes emplear el azúcar común o morena
- Ralladura de naranja o limón
- Un chorrito de vainilla
- Una pisca de sal
- Aceite, lleva un chorrito, no sabría decir cuánto en cantidad, serán dos o tres cucharadas, hay que ir agregando de a poco hasta que la masa quede manejable.
- 2 tazas de harina
- 2 cucharaditas de polvo de hornear
- 1 taza de avena
- Pasas de uva, cantidad a gusto, yo las remojé en jugo de naranja para que quedaran suaves y llenas de sabor, las puedes sustituir por chispas de chocolate, arándanos pasas, nueces o lo que más te guste.
Procedimiento:
En un recipiente colocar los huevos, azúcar, ralladura de limón, vainilla, sal, aceite y batir.
Por otro lado combinar los ingredientes secos: harina, polvo de hornear, avena, pasas de uva.
Agregar los ingredientes húmedos a los secos y combinar.
Precalienta el horno a temperatura media y mientras tanto hay que armar las galletas.
En una asadera aceitada, y con la ayuda de una o dos cucharas ve armando las galletitas, no tienen que ser prolijas, la gracia de estas galletas es que son rústicas, bien caseras y deliciosas.
Hornea hasta que comiencen a dorarse los bordes, aproximadamente 10 minutos.
Retira del horno, deja que se enfríen un poquito y desmolda.
Duran varios días guardadas en un recipiente hermético.
Son muy fáciles y deliciosas, seguro que se transforman en las favoritas de tu familia, y espero que también ¡sean la merienda de muchos niños!, ya son unas de las favoritas de Lisandro...